Sábado 28 de noviembre.
Lee Para el Estudio de esta Semana: Números 22-24; Deuteronomio 1:30; 20:4; Mateo 15:14; 1 Corintios 2:14; 2 Pedro 2:14-16; Apocalipsis 3:17.
Para Memorizar: “Porque raíz de todos los males es el amor al dinero, el cual codiciando algunos, se extraviaron de la fe, y fueron traspasados de muchos dolores” (1 Tim. 6:10).
LA HISTORIA DE BALAAM ES BIEN CONOCIDA y a menudo se la usa para hacer bromas, tales como: “Bueno, si Dios pudo hablar por medio del asna de Balaam, entonces puede hablar por medio de Fulano de Tal”.
En un sentido, esta historia no tiene nada de graciosa. Aunque puede ser leída en diferentes niveles, el encuentro de Balaam con Dios es otro ejemplo de cómo, si no vencemos el pecado con el poder de Dios, podemos ir hacia la destrucción.
En el Nuevo Testamento se menciona a Balaam tres veces (2 Ped. 2:15, 16; Judas 11; Apoc. 2:14), y ninguna de ellas le es muy favorable. En realidad, él es un símbolo del pecado.
Pedro habla acerca de la “locura” de Balaam, pero no la “locura” de una mente extraviada; sino la locura de alguien que, arrastrado por la codicia, estuvo listo para hacer por dinero lo que Balac le pedía, sin importarle que fuera malo.
Si alguien, como Balaam, un profeta, pudo estar tan “loco”, ¿cuanto más locos estaríamos nosotros si hiciéramos algo similar, especialmente con su triste ejemplo delante de nosotros?
Un Rey Temeroso y Engañado.
Domingo 29 de noviembre
Trata de ponerte en el lugar de Balac, rey de Moab. Aquí esta esa inmensa horda que había salido de la gran nación de Egipto, y que había sobrevivido, solo por milagro (¿de qué otra manera?) en el desierto durante cuatro décadas. Y ahora estaban acampados “en los campos de Moab” (Núm. 22:1), no lejos de su reino.
Aun cuando la Nación no había proferido ninguna amenaza contra ellos y no tenía la intención de invadir su reino, Balac, comprensiblemente, estaba nervioso. Después de todo, miren lo que acababan de hacer al rey Og de Basán, y al rey Sehón de los amorreos, cuya nación ya había derrotado a Moab (ver Núm. 21:26); para no mencionar lo que habían hecho a los cananeos (vers. 1-3). No era extraño que estuviera nervioso.
Lee Números 22:1 al 6. ¿Qué tenían los israelitas para que el rey tuviera tanto temor?
En realidad, si Israel hubiera sido una amenaza, ¿de qué debería haber estado realmente temeroso Balac? Ver Gén. 48:21; Éxo. 15:1; Deut. 1:30; 20:4.
Es un tanto irónico que Balac, afrontando lo que él creía ser un enemigo invencible, fuera a buscar a un profeta de Dios, del pueblo mismo que él quería que se maldijera y derrotara. Si se daba cuenta de lo que estaba haciendo, no lo sabemos; pero, desde nuestra perspectiva, es obvio que los planes de Balac estaban destinados al fracaso desde el mismo comienzo. Además, uno solamente se puede preguntar por qué no buscó a uno de sus santos locales para pedir a los dioses moabitas que los defendieran de Israel. En cambio, buscó a un profeta del verdadero Dios. Tal vez la clave de esto se encuentra en Números 22:6: “Maldíceme este pueblo, porque es más fuerte que yo; quizá yo pueda herirlo y echarlo de la tierra; pues yo sé que el que tú bendigas será bendito, y el que tú maldigas será maldito”.
Pregúntate cuánto realmente procuras depender de Dios, y cuánto confías en ti mismo, en tu dinero, tu trabajo, tus talentos, lo que sea. ¿Cómo puedes aprender a quitar tus ojos de estas cosas y ponerlos en Dios? ¿Por qué esto es naturalmente difícil de hacer? Ver 1 Cor. 2:14.
Balaam.
Lunes 30 de noviembre
¿Quién era este Balaam?
“Balaam había sido una vez hombre bueno y profeta de Dios; pero había apostatado, y se había entregado a la avaricia; no obstante, aun profesaba servir fielmente al Altísimo. No ignoraba la obra de Dios en favor de Israel; y, cuando los mensajeros le dieron su recado, sabía muy bien que debía rehusar los presentes de Balac, y despedir a los embajadores. Pero se aventuró a jugar con la tentación” (PP 468).
Lee Números 22:7 al 21. En un análisis superficial, pareciera como si Balaam se hubiera mantenido firme del lado de Dios. Sin embargo, si lo lees con cuidado, ¿qué indicios puedes encontrar de que jugaba con la tentación?
Balaam había pedido que los mensajeros se demoraran con él esa noche, declarando que él no daría una respuesta específica hasta que hubiera pedido consejo a Dios. Balaam debería haber notado que sus maldiciones no dañarían a Israel, pues Balaam conocía o, por lo menos, había conocido a Dios. Él realmente no necesitaba preguntarle a Dios; tal vez lo hizo con la esperanza de que hubiera otra respuesta. De cualquier manera, al pedirles que se detuvieran, cuando él debía haberlos despedido de inmediato, se abrió a la tentación. Después de todo, los hombres habían venido con “las dádivas de adivinación” (vers. 7).
Nota lo que ocurrió en la segunda invitación, cuando le prometieron aún más. Dios había dicho que, “si vinieron para llamarte estos hombres, levántate y vete con ellos; pero harás lo que yo te diga” (vers. 20). Pero temprano a la mañana –antes que los príncipes pudieran decir nada– Balaam enalbardó su asna y salió de inmediato con los embajadores hacia Moab. En otras palabras, a pesar de toda la pretensión de fidelidad y su afirmación de que no podría ser comprado por ningún precio, estaba ansioso de obtener todo el dinero que le habían ofrecido.
Lee 2 Pedro 2:14 al 16. ¿De qué manera consideró Pedro las acciones de Balaam? ¿Qué advertencia hay, para nosotros, con respecto a la codicia y la tentación? ¿Por qué es tan fácil racionalizar nuestro pecado hasta el punto de que no parece pecaminoso?
Confrontación no Natural.
Martes 1 de diciembre
Decidido, en su corazón, a obtener las recompensas que el rey le ofrecía, Balaam salió con los hombres hacia Moab. A pesar de toda la profesión externa de fidelidad, que hasta él podría haber llegado a creer, Dios sabía lo que estaba sucediendo en el corazón del hombre, y le respondió a él.
Lee Números 22:22 al 34, y responde las siguientes preguntas:
* ¿Qué importancia simbólica podría haber en el hecho de que el asna fue capaz de ver al ángel de Dios y que Balaam, un supuesto profeta de Dios, no pudo verlo? Ver Sof. 1:17; Mat. 15:14; Apoc. 3:17.
* Lee la primera respuesta de Balaam al asna después de que esta le habló. Piensa acerca de lo que estaba ocurriendo. ¿Qué respuesta irracional de Balaam revela la verdadera naturaleza de su corazón y su deseo de riquezas? Después de todo, ¿qué haría la mayor parte de la gente si de repente un animal comenzara a conversar con ellos?
* ¿Cómo revela esta historia la gracia de Dios a Balaam, a pesar de su curso de acción?
Mucho se ha escrito, a lo largo de los siglos, con respecto a esta historia, una de las más extrañas de la Biblia. Diferentes comentadores dan distintas interpretaciones. Sin embargo, un punto parece claro: Balaam era un hombre que había tenido una conexión especial con el Señor. Después de todo, Dios todavía le estaba hablando de una manera íntima. Y, no obstante, aun con esta conexión, Balaam estaba decidido a hacer lo que él mismo quería.
¿De qué maneras, aun de las formas más sutiles, te encuentras luchando contra Dios? Es decir, tú estás decidido a hacer lo que quieras aun cuando sabes que no es lo que Dios quiere. ¿Cómo puedes superar esta actitud peligrosa?
“La Muerte de los Rectos”.
Miércoles 2 de diciembre
Después del incidente con el asna, Balaam se presentó delante de Balac. Es interesante notar que Balac llevó a Balaam a Bamot-baal (“lugares altos de Baal”) (Núm. 22:41). Aparentemente, los paganos del Cercano Oriente edificaban sus altares en las cumbres de las montañas, como para estar más cerca de los dioses, a quienes querían influenciar. Balaam ordenó al Rey que construyera en ese lugar siete altares, y ofreció siete bueyes y siete carneros.
Lee las palabras que Balaam, controlado por Dios, habló acerca de los hijos de Israel. ¿Qué mensaje poderoso y qué promesa se encuentran en él? ¿Qué esperanza nos ofrece también a todos este mensaje? Ver Núm. 23:5-10; también 1 Cor. 15.
“Los vio, sostenidos por su brazo, entrar en el valle de la sombra de muerte. Y les vio salir de la tumba, coronados de gloria, honor e inmortalidad. Vio a los redimidos regocijarse en las glorias imperecederas de la Tierra Renovada. Mirando la escena, exclamó: ‘¿Quién contará el polvo de Jacob, o el número de la cuarta parte de Israel?’ Y, al ver la corona de gloria en cada frente y el regocijo que resplandecía en todos los semblantes, contempló con anticipación aquella vida ilimitada de pura felicidad, y rogó solemnemente: ‘¡Muera mi persona de la muerte de los rectos, y mi postrimería sea como la suya!’” (PP 476).
¿Qué significa “morir la muerte de los rectos”? ¿Cuál es la única manera en que podemos morir esa muerte? Rom. 3:20-24.
En un sentido, estas palabras de Dios, pronunciadas sobre su antiguo pueblo, reflejan la promesa del evangelio de todo el pueblo de Dios de todas las edades, la promesa de vida eterna por causa de la justicia de Jesús. Ninguno de nosotros es recto; ninguno de nosotros vive o muere, por sí mismo, con suficiente justicia para librarse de la tumba. Solo la justicia de Jesús puede hacerlo, que es acreditada a nosotros por fe. Aquí, en el libro de Números, con la historia de Balaam, Dios nos revela la promesa de la salvación por medio de Jesús.
Estrella y Cetro.
Jueves 3 de diciembre
Imagínate la sorpresa del rey cuando Balaam comenzó a bendecir a Israel. Aunque enojado, el Rey no estaba listo para renunciar. Llevó al profeta a otro monte, desde donde pudiera ver solamente una pequeña parte de Israel, y construyó otros siete altares, en los que ofrecieron bueyes y carneros. Balaam no fue “como en la primera y segunda vez, en busca de agüero” (Núm. 24:1). Otra vez, en lugar de lograr Balac la maldición por la que estaba dispuesto a pagar tanto, Balaam –controlado por Dios– pronunció otra bendición sobre Israel. Una tercera vez, Balac dispuso siete altares más con sus sacrificios en otra cumbre, pero Balaam sabía que era inútil pedir permiso a Dios para usar la magia contra Israel. Mirando a Israel desde este tercer ángulo, bendijo otra vez a la Nación (Núm. 23:27-30; 24:1-10), y Balac lo envió de vuelta a casa en desgracia, por su fracaso.
Lee la parábola que Balaam contó en Números 24:15 al 17. ¿De qué era esto una profecía, y cómo se cumplió? Gén. 49:10; Mat. 2:1, 2.
“Buscando un conocimiento más claro, [los sabios] se dirigieron a las Escrituras hebreas. [...] Balaam era uno de esos magos, aunque fuera en un tiempo profeta de Dios; por el Espíritu Santo, había predicho la prosperidad de Israel y la aparición del Mesías. [...] La profecía de Balaam declaraba: ‘Saldrá estrella de Jacob, y levantaráse cetro de Israel” [...] ¿Podría haber sido enviada esta extraña estrella como precursora del Prometido?” (DTG 41, 42).
Los estudiosos de la Biblia han visto por mucho tiempo, en estas palabras, una predicción mesiánica, la de un Redentor venidero. Un cetro (poder) y una estrella (luz) eran símbolos adecuados de Jesús. Aunque el Señor usó, en el tiempo de la profecía misma, los símbolos locales, que tendrían significado para quienes los oyeron entonces, el principio detrás de la profecía –la del poder y la victoria de Cristo– se aplica a todo el mundo. Jesús es la Luz del mundo y el dueño de él; y, no importa cuáles sean los planes humanos, al fin todos verán que Dios prevalecerá. Ver Isa. 45:23; Rom. 14:11; Fil. 2:10.
Por mucha que sea la injusticia en el mundo, tenemos la promesa de que Dios prevalecerá, que la justicia también lo hará. ¿De qué modo esta promesa te ayuda a soportar toda la injusticia que ves ahora?
Para Estudiar y Meditar.
Viernes 4 de diciembre
Lee el capítulo “Balaam”, pp. 467-482, en Patriarcas y profetas; “Las bienaventuranzas”, pp. 11-42; y “La espiritualidad de la Ley”, pp. 43-68, en El discurso Maestro de Jesucristo.
“El que abusa de los animales porque los tiene en su poder es un cobarde y un tirano. La tendencia a causar dolor, ya sea a nuestros semejantes o a los animales irracionales, es satánica. Muchos creen que nunca será conocida su crueldad, porque las pobres bestias no la pueden revelar. Pero, si los ojos de esos hombres pudiesen abrirse como se abrieron los de Balaam, verían a un ángel de Dios de pie como testigo, para testificar contra ellos en las cortes celestiales. Asciende al cielo un registro, y vendrá el día cuando el juicio se pronunciará contra los que abusan de los seres creados por Dios” (PP 473).
Preguntas Para Dialogar:
1. ¿Cuáles son otras lecciones espirituales que puedes obtener de la historia de Balaam? ¿Qué enseña, por ejemplo, acerca de la soberanía de Dios, de la libertad humana para elegir, y de la providencia de Dios, o acerca de la pecaminosidad del hombre?
2. Medita más en la idea de “la muerte de los rectos”. Si tú fueras a morir hoy, ¿sería una “muerte de los rectos”? Justifica tu respuesta.
3. El dinero es una influencia increíblemente corruptora en todas las áreas de la vida, incluyendo nuestra vida religiosa. ¿Cómo podemos, como cristianos, protegernos a nosotros mismos, a nuestra fe y a nuestra iglesia de la potencial influencia corruptora del dinero?
4. Lee Judas 11 y Apocalipsis 2:14, los que, aparte de los versículos que ya consideramos en 2 Pedro, son los únicos otros versículos del Nuevo Testamento que se refieren a Balaam. ¿Qué podemos aprender de ellos que nos puede ayudar a comprender mejor qué fue lo que perdió a Balaam?
Resumen: Este informe del intento de Balaam de maldecir a Israel, a cambio de riquezas y honores, trajo a la luz su desordenada avaricia y codicia. El décimo Mandamiento nos advierte de este rasgo humano pecaminoso. Ninguno de nosotros es inmune a esto, o a cualquier otro pecado, que si no es vencido puede conducirnos a nuestra ruina final. Cuán importante es que aprendamos de los errores de Balaam.
Guía de Estudio de la Biblia: Un pueblo en marcha: El libro de Números / Edición Adultos.
Periodo: Trimestre Octubre-Diciembre de 2009
Autor: Frank B. Holbrook. B.D., M.Th. Teólogo adventista ya desaparecido. De 1981 a 1990, fue director asociado del Instituto de Investigación Bíblica de la Conferencia General de la Iglesia Adventista del Séptimo Día, Silver Spring, Maryland. También fue Profesor de Religión de la hoy Southern Adventist University.
Editor: Clifford Goldstein
Lee Para el Estudio de esta Semana: Números 22-24; Deuteronomio 1:30; 20:4; Mateo 15:14; 1 Corintios 2:14; 2 Pedro 2:14-16; Apocalipsis 3:17.
Para Memorizar: “Porque raíz de todos los males es el amor al dinero, el cual codiciando algunos, se extraviaron de la fe, y fueron traspasados de muchos dolores” (1 Tim. 6:10).
LA HISTORIA DE BALAAM ES BIEN CONOCIDA y a menudo se la usa para hacer bromas, tales como: “Bueno, si Dios pudo hablar por medio del asna de Balaam, entonces puede hablar por medio de Fulano de Tal”.
En un sentido, esta historia no tiene nada de graciosa. Aunque puede ser leída en diferentes niveles, el encuentro de Balaam con Dios es otro ejemplo de cómo, si no vencemos el pecado con el poder de Dios, podemos ir hacia la destrucción.
En el Nuevo Testamento se menciona a Balaam tres veces (2 Ped. 2:15, 16; Judas 11; Apoc. 2:14), y ninguna de ellas le es muy favorable. En realidad, él es un símbolo del pecado.
Pedro habla acerca de la “locura” de Balaam, pero no la “locura” de una mente extraviada; sino la locura de alguien que, arrastrado por la codicia, estuvo listo para hacer por dinero lo que Balac le pedía, sin importarle que fuera malo.
Si alguien, como Balaam, un profeta, pudo estar tan “loco”, ¿cuanto más locos estaríamos nosotros si hiciéramos algo similar, especialmente con su triste ejemplo delante de nosotros?
Un Rey Temeroso y Engañado.
Domingo 29 de noviembre
Trata de ponerte en el lugar de Balac, rey de Moab. Aquí esta esa inmensa horda que había salido de la gran nación de Egipto, y que había sobrevivido, solo por milagro (¿de qué otra manera?) en el desierto durante cuatro décadas. Y ahora estaban acampados “en los campos de Moab” (Núm. 22:1), no lejos de su reino.
Aun cuando la Nación no había proferido ninguna amenaza contra ellos y no tenía la intención de invadir su reino, Balac, comprensiblemente, estaba nervioso. Después de todo, miren lo que acababan de hacer al rey Og de Basán, y al rey Sehón de los amorreos, cuya nación ya había derrotado a Moab (ver Núm. 21:26); para no mencionar lo que habían hecho a los cananeos (vers. 1-3). No era extraño que estuviera nervioso.
Lee Números 22:1 al 6. ¿Qué tenían los israelitas para que el rey tuviera tanto temor?
En realidad, si Israel hubiera sido una amenaza, ¿de qué debería haber estado realmente temeroso Balac? Ver Gén. 48:21; Éxo. 15:1; Deut. 1:30; 20:4.
Es un tanto irónico que Balac, afrontando lo que él creía ser un enemigo invencible, fuera a buscar a un profeta de Dios, del pueblo mismo que él quería que se maldijera y derrotara. Si se daba cuenta de lo que estaba haciendo, no lo sabemos; pero, desde nuestra perspectiva, es obvio que los planes de Balac estaban destinados al fracaso desde el mismo comienzo. Además, uno solamente se puede preguntar por qué no buscó a uno de sus santos locales para pedir a los dioses moabitas que los defendieran de Israel. En cambio, buscó a un profeta del verdadero Dios. Tal vez la clave de esto se encuentra en Números 22:6: “Maldíceme este pueblo, porque es más fuerte que yo; quizá yo pueda herirlo y echarlo de la tierra; pues yo sé que el que tú bendigas será bendito, y el que tú maldigas será maldito”.
Pregúntate cuánto realmente procuras depender de Dios, y cuánto confías en ti mismo, en tu dinero, tu trabajo, tus talentos, lo que sea. ¿Cómo puedes aprender a quitar tus ojos de estas cosas y ponerlos en Dios? ¿Por qué esto es naturalmente difícil de hacer? Ver 1 Cor. 2:14.
Balaam.
Lunes 30 de noviembre
¿Quién era este Balaam?
“Balaam había sido una vez hombre bueno y profeta de Dios; pero había apostatado, y se había entregado a la avaricia; no obstante, aun profesaba servir fielmente al Altísimo. No ignoraba la obra de Dios en favor de Israel; y, cuando los mensajeros le dieron su recado, sabía muy bien que debía rehusar los presentes de Balac, y despedir a los embajadores. Pero se aventuró a jugar con la tentación” (PP 468).
Lee Números 22:7 al 21. En un análisis superficial, pareciera como si Balaam se hubiera mantenido firme del lado de Dios. Sin embargo, si lo lees con cuidado, ¿qué indicios puedes encontrar de que jugaba con la tentación?
Balaam había pedido que los mensajeros se demoraran con él esa noche, declarando que él no daría una respuesta específica hasta que hubiera pedido consejo a Dios. Balaam debería haber notado que sus maldiciones no dañarían a Israel, pues Balaam conocía o, por lo menos, había conocido a Dios. Él realmente no necesitaba preguntarle a Dios; tal vez lo hizo con la esperanza de que hubiera otra respuesta. De cualquier manera, al pedirles que se detuvieran, cuando él debía haberlos despedido de inmediato, se abrió a la tentación. Después de todo, los hombres habían venido con “las dádivas de adivinación” (vers. 7).
Nota lo que ocurrió en la segunda invitación, cuando le prometieron aún más. Dios había dicho que, “si vinieron para llamarte estos hombres, levántate y vete con ellos; pero harás lo que yo te diga” (vers. 20). Pero temprano a la mañana –antes que los príncipes pudieran decir nada– Balaam enalbardó su asna y salió de inmediato con los embajadores hacia Moab. En otras palabras, a pesar de toda la pretensión de fidelidad y su afirmación de que no podría ser comprado por ningún precio, estaba ansioso de obtener todo el dinero que le habían ofrecido.
Lee 2 Pedro 2:14 al 16. ¿De qué manera consideró Pedro las acciones de Balaam? ¿Qué advertencia hay, para nosotros, con respecto a la codicia y la tentación? ¿Por qué es tan fácil racionalizar nuestro pecado hasta el punto de que no parece pecaminoso?
Confrontación no Natural.
Martes 1 de diciembre
Decidido, en su corazón, a obtener las recompensas que el rey le ofrecía, Balaam salió con los hombres hacia Moab. A pesar de toda la profesión externa de fidelidad, que hasta él podría haber llegado a creer, Dios sabía lo que estaba sucediendo en el corazón del hombre, y le respondió a él.
Lee Números 22:22 al 34, y responde las siguientes preguntas:
* ¿Qué importancia simbólica podría haber en el hecho de que el asna fue capaz de ver al ángel de Dios y que Balaam, un supuesto profeta de Dios, no pudo verlo? Ver Sof. 1:17; Mat. 15:14; Apoc. 3:17.
* Lee la primera respuesta de Balaam al asna después de que esta le habló. Piensa acerca de lo que estaba ocurriendo. ¿Qué respuesta irracional de Balaam revela la verdadera naturaleza de su corazón y su deseo de riquezas? Después de todo, ¿qué haría la mayor parte de la gente si de repente un animal comenzara a conversar con ellos?
* ¿Cómo revela esta historia la gracia de Dios a Balaam, a pesar de su curso de acción?
Mucho se ha escrito, a lo largo de los siglos, con respecto a esta historia, una de las más extrañas de la Biblia. Diferentes comentadores dan distintas interpretaciones. Sin embargo, un punto parece claro: Balaam era un hombre que había tenido una conexión especial con el Señor. Después de todo, Dios todavía le estaba hablando de una manera íntima. Y, no obstante, aun con esta conexión, Balaam estaba decidido a hacer lo que él mismo quería.
¿De qué maneras, aun de las formas más sutiles, te encuentras luchando contra Dios? Es decir, tú estás decidido a hacer lo que quieras aun cuando sabes que no es lo que Dios quiere. ¿Cómo puedes superar esta actitud peligrosa?
“La Muerte de los Rectos”.
Miércoles 2 de diciembre
Después del incidente con el asna, Balaam se presentó delante de Balac. Es interesante notar que Balac llevó a Balaam a Bamot-baal (“lugares altos de Baal”) (Núm. 22:41). Aparentemente, los paganos del Cercano Oriente edificaban sus altares en las cumbres de las montañas, como para estar más cerca de los dioses, a quienes querían influenciar. Balaam ordenó al Rey que construyera en ese lugar siete altares, y ofreció siete bueyes y siete carneros.
Lee las palabras que Balaam, controlado por Dios, habló acerca de los hijos de Israel. ¿Qué mensaje poderoso y qué promesa se encuentran en él? ¿Qué esperanza nos ofrece también a todos este mensaje? Ver Núm. 23:5-10; también 1 Cor. 15.
“Los vio, sostenidos por su brazo, entrar en el valle de la sombra de muerte. Y les vio salir de la tumba, coronados de gloria, honor e inmortalidad. Vio a los redimidos regocijarse en las glorias imperecederas de la Tierra Renovada. Mirando la escena, exclamó: ‘¿Quién contará el polvo de Jacob, o el número de la cuarta parte de Israel?’ Y, al ver la corona de gloria en cada frente y el regocijo que resplandecía en todos los semblantes, contempló con anticipación aquella vida ilimitada de pura felicidad, y rogó solemnemente: ‘¡Muera mi persona de la muerte de los rectos, y mi postrimería sea como la suya!’” (PP 476).
¿Qué significa “morir la muerte de los rectos”? ¿Cuál es la única manera en que podemos morir esa muerte? Rom. 3:20-24.
En un sentido, estas palabras de Dios, pronunciadas sobre su antiguo pueblo, reflejan la promesa del evangelio de todo el pueblo de Dios de todas las edades, la promesa de vida eterna por causa de la justicia de Jesús. Ninguno de nosotros es recto; ninguno de nosotros vive o muere, por sí mismo, con suficiente justicia para librarse de la tumba. Solo la justicia de Jesús puede hacerlo, que es acreditada a nosotros por fe. Aquí, en el libro de Números, con la historia de Balaam, Dios nos revela la promesa de la salvación por medio de Jesús.
Estrella y Cetro.
Jueves 3 de diciembre
Imagínate la sorpresa del rey cuando Balaam comenzó a bendecir a Israel. Aunque enojado, el Rey no estaba listo para renunciar. Llevó al profeta a otro monte, desde donde pudiera ver solamente una pequeña parte de Israel, y construyó otros siete altares, en los que ofrecieron bueyes y carneros. Balaam no fue “como en la primera y segunda vez, en busca de agüero” (Núm. 24:1). Otra vez, en lugar de lograr Balac la maldición por la que estaba dispuesto a pagar tanto, Balaam –controlado por Dios– pronunció otra bendición sobre Israel. Una tercera vez, Balac dispuso siete altares más con sus sacrificios en otra cumbre, pero Balaam sabía que era inútil pedir permiso a Dios para usar la magia contra Israel. Mirando a Israel desde este tercer ángulo, bendijo otra vez a la Nación (Núm. 23:27-30; 24:1-10), y Balac lo envió de vuelta a casa en desgracia, por su fracaso.
Lee la parábola que Balaam contó en Números 24:15 al 17. ¿De qué era esto una profecía, y cómo se cumplió? Gén. 49:10; Mat. 2:1, 2.
“Buscando un conocimiento más claro, [los sabios] se dirigieron a las Escrituras hebreas. [...] Balaam era uno de esos magos, aunque fuera en un tiempo profeta de Dios; por el Espíritu Santo, había predicho la prosperidad de Israel y la aparición del Mesías. [...] La profecía de Balaam declaraba: ‘Saldrá estrella de Jacob, y levantaráse cetro de Israel” [...] ¿Podría haber sido enviada esta extraña estrella como precursora del Prometido?” (DTG 41, 42).
Los estudiosos de la Biblia han visto por mucho tiempo, en estas palabras, una predicción mesiánica, la de un Redentor venidero. Un cetro (poder) y una estrella (luz) eran símbolos adecuados de Jesús. Aunque el Señor usó, en el tiempo de la profecía misma, los símbolos locales, que tendrían significado para quienes los oyeron entonces, el principio detrás de la profecía –la del poder y la victoria de Cristo– se aplica a todo el mundo. Jesús es la Luz del mundo y el dueño de él; y, no importa cuáles sean los planes humanos, al fin todos verán que Dios prevalecerá. Ver Isa. 45:23; Rom. 14:11; Fil. 2:10.
Por mucha que sea la injusticia en el mundo, tenemos la promesa de que Dios prevalecerá, que la justicia también lo hará. ¿De qué modo esta promesa te ayuda a soportar toda la injusticia que ves ahora?
Para Estudiar y Meditar.
Viernes 4 de diciembre
Lee el capítulo “Balaam”, pp. 467-482, en Patriarcas y profetas; “Las bienaventuranzas”, pp. 11-42; y “La espiritualidad de la Ley”, pp. 43-68, en El discurso Maestro de Jesucristo.
“El que abusa de los animales porque los tiene en su poder es un cobarde y un tirano. La tendencia a causar dolor, ya sea a nuestros semejantes o a los animales irracionales, es satánica. Muchos creen que nunca será conocida su crueldad, porque las pobres bestias no la pueden revelar. Pero, si los ojos de esos hombres pudiesen abrirse como se abrieron los de Balaam, verían a un ángel de Dios de pie como testigo, para testificar contra ellos en las cortes celestiales. Asciende al cielo un registro, y vendrá el día cuando el juicio se pronunciará contra los que abusan de los seres creados por Dios” (PP 473).
Preguntas Para Dialogar:
1. ¿Cuáles son otras lecciones espirituales que puedes obtener de la historia de Balaam? ¿Qué enseña, por ejemplo, acerca de la soberanía de Dios, de la libertad humana para elegir, y de la providencia de Dios, o acerca de la pecaminosidad del hombre?
2. Medita más en la idea de “la muerte de los rectos”. Si tú fueras a morir hoy, ¿sería una “muerte de los rectos”? Justifica tu respuesta.
3. El dinero es una influencia increíblemente corruptora en todas las áreas de la vida, incluyendo nuestra vida religiosa. ¿Cómo podemos, como cristianos, protegernos a nosotros mismos, a nuestra fe y a nuestra iglesia de la potencial influencia corruptora del dinero?
4. Lee Judas 11 y Apocalipsis 2:14, los que, aparte de los versículos que ya consideramos en 2 Pedro, son los únicos otros versículos del Nuevo Testamento que se refieren a Balaam. ¿Qué podemos aprender de ellos que nos puede ayudar a comprender mejor qué fue lo que perdió a Balaam?
Resumen: Este informe del intento de Balaam de maldecir a Israel, a cambio de riquezas y honores, trajo a la luz su desordenada avaricia y codicia. El décimo Mandamiento nos advierte de este rasgo humano pecaminoso. Ninguno de nosotros es inmune a esto, o a cualquier otro pecado, que si no es vencido puede conducirnos a nuestra ruina final. Cuán importante es que aprendamos de los errores de Balaam.
Guía de Estudio de la Biblia: Un pueblo en marcha: El libro de Números / Edición Adultos.
Periodo: Trimestre Octubre-Diciembre de 2009
Autor: Frank B. Holbrook. B.D., M.Th. Teólogo adventista ya desaparecido. De 1981 a 1990, fue director asociado del Instituto de Investigación Bíblica de la Conferencia General de la Iglesia Adventista del Séptimo Día, Silver Spring, Maryland. También fue Profesor de Religión de la hoy Southern Adventist University.
Editor: Clifford Goldstein
Que historia increíble, que hoy se puede repetir: "Aparecerán muchos falsos profetas, y engañarán a mucha gente". Mateo 24: 11
ResponderEliminar¿Modernos Balaam existen dentro del adventismo?
ResponderEliminar¿Conocen algún Balaam moderno dentro de la iglesia?
Creo que hay algunos...
hay muchos baam , moderno, que ostenta su titulo academico, su posicion, economica, y se olvida del objetivo, por el cual fueron llamado,esos baam moderno, perjudica enormemente, la obra de DIOS.
ResponderEliminarYo cre hermanos que con la alluda de nuestro Señor podemos superar estos obtaculos del enemigo no dejando de lado lo que aprendemos de los errores de nuestros antepasados ,no olvidemos que somos un pueblo escogido y nuestra lucha es constante con la alluda de Dios.
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