Lección 4: Trompetas, sangre, nube y fuego / Edición para Maestros

El sábado enseñaré...

Texto Clave: "Limpiaos, pues, de la vieja levadura, para que seáis nueva masa, sin levadura como sois; porque nuestra pascua, que es Cristo, ya fue sacrificada por nosotros". 1 Corintios 5:7.

Enseña a tu clase a:

Saber que hay muchas maneras concretas en que Dios revela su presencia y su poder guiador a su pueblo.
Sentir que estamos conectados con Dios por medio del reconocimiento de su presencia divina.
Hacer que salgamos con fe, en respuesta al poder guiador de Dios.

Bosquejo de la Lección

1. Saber: Dios revelado en la sangre, en la nube, y la columna de fuego y las trompetas

A. Israel debía esconderse detrás de los postes de las puertas marcadas con la sangre del cordero, a fin de que el ángel destructor pasara por alto esa casa. ¿Qué les enseñaba este acto físico?
B. La nube de fuego y las trompetas señalaban la presencia de Dios con su pueblo y su conducción. ¿Por qué estas señales tangibles de la conducción divina eran tan importantes en ese momento de la historia divina?

2. Sentir: Percibir la presencia visible y audible de Dios

A. Cuando participamos de la Cena de comunión, estamos conmemorando la muerte de nuestro Señor por nosotros, tipificada en la Pascua. ¿De qué modo estos símbolos físicos del sacrificio de Jesús te hablan a ti?
B. ¿En qué formas siente la presencia de Dios en tu vida diaria mediante sonidos, toques y cosas que ves? ¿De qué otras maneras sientes la presencia de Dios?

3. Hacer: Moverse cuando el Espíritu te mueve

A. ¿Cómo te sientes cuando Dios te pide que salgas de tu zona de comodidad, y cambies de dirección? ¿En qué forma respondes típicamente?
B. ¿Cuáles son algunas áreas en las que estás buscando la voluntad de Dios en tu vida? ¿Cuáles son algunos ejemplos de ocasiones en que Dios te guió en lo pasado?

Resumen: Los hijos de Israel eran niños espirituales, y Dios les dio muchos ejemplos concretos de su cuidado y su conducción. En nuestra etapa de la historia y del desarrollo, aunque dependemos mucho de las Escrituras y del Espíritu Santo, Dios todavía usa muchas experiencias de los sentidos para alcanzarnos.

CICLO DE APRENDIZAJE

Concepto clave: No tenemos nada que temer en el presente excepto que nos olvidemos cómo Dios nos ha guiado en lo pasado.

PASO 1: ¡Motiva!

Solo para los maestros: Sea que compartamos la pasión que tiene otra persona por una actividad o no, ya sea el arte, o los deportes, o la construcción o la costura, todos ciertamente podemos apreciar el entusiasmo de otra persona por las cosas que le interesan. No nos sorprendemos cuando un jugador profesional pasa un tiempo considerable observando juegos o que él cite estadísticas de su deporte favorito y recite trozos de la historia de su deporte. De hecho, podríamos poner en duda su condición de aficionado serio si no recordara ninguna de esas cosas. ¡Cuán importante es, entonces, para los que pretenden un amor apasionado por Cristo, el recordar “su historia”!

Actividad inicial: En un rotafolio (hojas grandes de papel) o en un pizarrón, pide a la clase que haga una lista de cosas que ellos olvidaron. Regístralos en una columna del lado izquierdo. La lista puede incluir cosas como llaves, su aniversario de casamiento, el cumpleaños de alguien, recoger un niño de la escuela, pagar una cuenta, consultas dentales, sacar la basura a la vereda, etc. Luego, pide a la clase que recuerde las consecuencias de su olvido. Esta lista puede ser registrada en forma abreviada en la columna de la derecha. Primero, concéntrate en los elementos mundanos, y luego pasa a los que tienen una orientación espiritual. Si la clase no ha enumerado más respuestas espiritualmente orientadas, p. ej., oraciones, lectura de la Biblia y asistencia a la iglesia, añade esos tipos de respuestas al hacer la transición al análisis de las consecuencias. Anima a la clase a reflexionar sobre la diferencia o importancia del olvido de sacar la basura afuera, comparado, por ejemplo, con olvidarse de orar.

PASO 2: ¡Explora!

Comentario de la Biblia

I. En memoria de mí (Repasa, con la clase, Núm. 9:1-5; Éxo. 12:1-29; Mat. 26:20-29; Mar. 14:17-25; Luc. 22:14-23; Juan 13:18-30).

“La Pascua fue ordenada como conmemoración del libramiento de Israel de la servidumbre egipcia. Dios había indicado que, año tras año, cuando los hijos preguntasen el significado de este rito, se les repitiese la historia. Así había de mantenerse fresca en la memoria de todos aquella maravillosa liberación. [...] En ocasión de su liberación de Egipto, los hijos de Israel comieron la Pascua de pie, con los lomos ceñidos [...] listos para el viaje. [...] Estaban por ser arrojados del país de Egipto, e iban a empezar un viaje penoso y difícil a través del desierto” (DTG 608, 609).

Considera: Cristo es nuestra Pascua, nuestra liberación del pecado. ¿Qué actividades específicas incorporamos a nuestras vidas para mantener la liberación fresca en nuestras mentes? ¿Qué resultados positivos hemos visto como resultado directo de repetir nuestra historia personal con Jesús para beneficio de otros? La postura de los israelitas, cuando comían la cena pascual, indicaba que estaban preparándose para un viaje que probaría ser doloroso y difícil. ¿De qué maneras tu salida (“éxodo”) de la esclavitud del pecado condujo al dolor y las dificultades?

II. “Nos serás en lugar de ojos” (Repasa, con la clase, Núm. 10:29-32; Luc. 9:28-31; Mat. 26:36-43).

Es cierto que, en última instancia, el único remedio seguro para nuestro temor al futuro es la confianza en Dios y un aprecio que se profundiza cada vez más por su obra anterior en nuestras vidas; el apoyo y el consejo humanos, sin embargo, desempeñan un papel en ayudarnos a afrontar y sobreponernos a la adversidad.

Considera: Buscar el consejo y la ayuda de otros seres humanos ¿muestra necesariamente una falta de confianza en Dios? ¿Es mi iglesia un recurso de apoyo para aquellos que luchan por encontrar la conducción de Dios en un mundo a menudo caótico o estamos más como los discípulos, dormidos cuando se los necesitaba más?

PASO 3: ¡Aplica!

Solo para los maestros: Algunos pueden tener problemas para recordar su historia con Dios porque no saben lo que están buscando. Para muchas personas, Dios es invisible. ¿Cómo podemos ayudar a jóvenes cristianos que luchan, para que vean la mano de Dios operando en sus vidas, si todavía están esperando verlo en visión u oírlo en una voz audible? Lo siguiente ofrece una ilustración sencilla de cómo podemos estar seguros de que Dios se está moviendo en nuestras vidas aun cuando no podamos verlo cara a cara.

Actividad grupal/ilustración

Lista de elementos: Una hoja de cartulina, un imán fuerte, pequeños objetos magnéticos como clips de papel o arandelas. Acción: Pon la cartulina en forma horizontal, de tal manera que la clase no pueda ver el imán debajo de ella. Mueve el imán de manera que los trocitos metálicos que están sobre la cartulina se muevan también, en línea recta, o en otro diseño.

Preguntas para reflexionar:

1. ¿De qué modo se explican los movimientos de los objetos metálicos?

2. ¿Creerías si alguien te dijera que los objetos que se mueven lo hacen por sí mismos? ¿Cómo se puede explicar el diseño en ausencia de una fuerza visible?

3. En la vida real, ¿se ubican las cosas sencillamente por efecto del azar? ¿Hay alguna explicación mejor para los movimientos de la vida?

4. El hecho de que no vemos a Dios cara a cara ¿niega la posibilidad de que Dios se esté moviendo activamente en nuestro mundo?
5. En la ilustración, podemos ver dónde ha estado el imán al ver el movimiento en la superficie de la cartulina. En la vida real, podemos ver dónde Dios ha estado y actuado al estudiar sus movimientos en la historia y en nuestras vidas personales.

PASO 4: ¡Crea!

Solo para los maestros: Esta semana, el centro de interés sugiere dos oportunidades para la aplicación, personal y como congregación. La primera es más fácil y no requiere colaboración, pero la segunda ofrece una oportunidad para afirmar el trabajo en equipos. Se pueden realizar las dos opciones para la tarea sugerida.

Actividad primera: Escribe tu historia personal con Dios. Reflexiona acerca de cómo Dios te ha guiado a través de la adversidad (como a través de la pérdida de seres amados, la depresión o la soledad, desafíos académicos, pérdida de trabajo, problemas financieros, vacío espiritual, etc.) Registra tus momentos altos y los bajos, las respuestas a tu oración y las promesas de Dios que te ayudaron a seguir adelante.

Actividad segunda: Estudia documentos que arrojan luz sobre la historia de la iglesia local, tales como los registros de la secretaría, registros financieros públicos, historias de la iglesia que se han escrito, boletines antiguos de la iglesia. Entrevista a quienes han sido miembros de la congregación por más tiempo. Pregúntales acerca de pastores y maestros que pasaron por la iglesia, incluyendo a los evangelistas itinerantes. Trata de descubrir por qué la iglesia prosperó o decayó en ciertos períodos. Registra las lecciones que tu grupo aprende de este estudio y compártelas con la clase.

Sugerencia final: Si vives cerca de un lugar que tenga una historia espiritual importante, tal como un lugar histórico de la iglesia, visítalo con tu clase.


Guía de Estudio de la Biblia: Un pueblo en marcha: El libro de Números / Edición para Maestros.

Periodo: Trimestre Octubre-Diciembre de 2009
Autor: Frank B. Holbrook. B.D., M.Th. Teólogo adventista ya desaparecido. De 1981 a 1990, fue director asociado del Instituto de Investigación Bíblica de la Conferencia General de la Iglesia Adventista del Séptimo Día, Silver Spring, Maryland. También fue Profesor de Religión de la hoy Southern Adventist University.
Editor: Clifford Goldstein